domingo, 26 de julio de 2015

SOBRE UNAS PALABRAS RECIENTES DE MONS. WILLIAMSON ACERCA DE LA MISA NUEVA






Un lector nos ha reenviado el siguiente correo electrónico, en cuyo texto hemos suprimido la traducción al francés y hemos agregado algunos comentarios en color rojo:


Enviamos sermón Domingo 9º post Pentecostés y una noticia grave sobre Mons. Williamson. Los saludamos en María Santísima.

Monseñor Williamson y la misa moderna

*Esta filmación muestra palabras de Mons. Williamson diciendo de ir a “la misa moderna”. Nos parece esto algo muy grave de parte de Monseñor. 

*Se puede ver este video en el link que sigue:

*No aprobamos el estilo un poco “burlesco” que tiene el video (aproximadamente luego de la mitad), pero vemos –de cualquier manera- que la información que ellos difunden es veraz. 

*Las palabras de Monseñor duran unos 12 minutos, todo el video unos 30.

-Minuto 0:55 “There´s the principles and then there´s the practice”: “Están los principios y después está la práctica”. 
Según una interpretación no malévola de esta frase (interpretación congruente, por lo demás, con la vida de Monseñor Williamson), el Obispo quiere decir que los principios morales son claros en la teoría pero difíciles de aplicar, muchas veces, en la práctica. Según una interpretación tan malévola como incongruente con la vida de este gran defensor de la fe, él estaría diciendo que hay principios morales que no se aplican en la realidad concreta, siendo lícito negar esos principios mediante el actuar concreto.

-Minuto 6:46 “There have been eucharistic miracles with the novus ordo mass”: “Han habido milagros eucarísticos con la misa moderna [traducción correcta: con la misa Novus Ordo]”.
Acá los críticos afirman implícitamente que en ninguna misa moderna puede haber algún milagro. Se trata de una falacia lógica: M. Los milagros son obrados por el poder de Dios para probar la verdad o bondad de algo. m. La misa nueva es mala. C. Luego, no puede darse ningún milagro en una misa nueva. En cuanto a la menor, distingo: que el rito de la misa celebrada conforme al Novus Ordo es algo malo, concedo; que la misa nueva válidamente celebrada, en cuanto se verifica en ella el Sacramento y existe verdadero Sacrificio eucarístico, es algo igualmente malo, niego; quedando con eso destruida la falacia. 
Un eventual milagro en una misa nueva válidamente celebrada confirmaría, por ejemplo, la doctrina católica acerca de la presencia real de Cristo en las especies consagradas, no la pretendida bondad del "rito bastardo".
Es más: la profecía es un milagro de orden intelectual. Caifás realmente profetizó, pero de ello no se sigue que Dios haya querido probar la bondad moral de este personaje mediante ese verdadero milagro. 

-Minuto 8:56 “There are cases when even the Novus Ordo Mass can be attended with an effect of building one´s faith instead of losing it”: “Hay casos en que incluso se puede asistir a la misa moderna [traducción correcta: a la misa Novus Ordocon un efecto de construir la fe de uno en vez de perderla”. 
Monseñor está respondiendo a un mujer que, entre sollozos, dijo asistir tanto a la misa tridentina como a la misa nueva. Mons. Williamson no quiere dar una respuesta tajante a fin de no "apagar la mecha que humea" ni "quebrar la caña cascada". Eso explica ciertas imprecisiones, el uso del argumento ad hóminen, y la perspectiva más bien centrada en aspectos subjetivos (relativos a la conciencia) de la respuesta. 
Un ejemplo entre muchos: un judío, un masón, o un protestante comienza a asistir a la misa nueva de su Parroquia: ¿siempre y necesariamente eso lo va a alejar de Dios? la respuesta obvia es que no, y de hecho todos conocemos casos de tradicionalistas que al inicio de su conversión al catolicismo, asistían a la misa nueva. Un católico que sin culpa ignora que, objetivamente, siempre es ilícito participar activamente en la misa nueva, como puede ser el caso de la persona que hizo la pregunta; ¿siempre y necesariamente va a sufrir menoscabo de su fe por participar activamente en tal misa con recta intención y con dicha ignorancia invencible? Es evidente que no.

-Minuto 9:53 “Be very careful, be very careful with the Novus… stay away of the Novus Ordo, but exceptionally… if you´re watching and praying even there you may find the grace of God, if you do make use of it in order to sanctify your soul” [falta esto: but exceptionally, if you’re watching and praying, even there you find the grace of God. If you do make use of it in order to sanctify your soul].  : “Sea muy cuidadosa (nota: está hablando a una señora), sea muy cuidadosa con la moderna [traducción correcta: con el Novus]…, manténgase lejos de la misa moderna [traducción correcta: del Novus Ordo], pero excepcionalmente… si está vigilando y rezando aun ahí usted puede encontrar la gracia de Dios, si lo hace en orden a santificar su alma” [traducción correcta: Si usted hace eso para santificar su alma].
Como en los casos típicos de ignorancia invencible. ¿O hay que sostener que Dios niega toda gracia en una misa nueva en la que por ser celebrada válidamente, se verifica el Sacramento y constituye verdadero Sacrificio eucarístico? 

-Minuto 10:37 “Therefore, I would not say every single person must stay away from every single Novus Ordo Mass”: “Por lo tanto, yo no diría que cada persona debe mantenerse lejos de cada misa moderna [traducción correcta: misa Novus Ordo]”.
Atendiendo a aspectos subjetivos o de conciencia, es correcto lo que dice Monseñor, pero no desde un punto de vista objetivo. Esto está perfectamente acorde a la enseñanza tradicional de la Teología Moral, como lo prueba la siguiente cita del Curso de Teología Moral que se impartía en el seminario de La Reja, Buenos Aires, antes de la actual crisis de la FSSPX: 

El problema de la asistencia a la misa nueva o a misas válidas pero ilícitas de los cismáticos o herejes

Por razón de la virtud de fe, el católico está obligado a evitar todo lo que pueda ponerla en peligro, ya de perderla, ya de debilitarla, en su propia alma o en la de aquellos que le están confiados (hijos, cónyuge, fieles, etc.). 

No es aquí donde corresponde tratar el tema de la “misa nueva”, su malicia y peligrosidad para la verdadera fe católica, por lo que remitimos a los abundantes estudios ya realizados sobre el particular. 

Los Cardenales Ottaviani y Bacchi, luego de afirmar que el “Novus Ordo Missæ... se aleja de manera impresionante, en conjunto y en detalle de la teología católica de la Santa Misa...”, concluían en su «breve examen crítico», que “el apartarse de la tradición litúrgica, que fue por cuatro siglos signo y garantía de la unidad del culto, para sustituirla por otra nueva – que no puede no ser un signo de cisma, por las innumerables facultades implícitamente concedidas, y la cual pulula ella misma en gravísimas ambigüedades, por no decir errores manifiestos contra la pureza de la Fe Católica – nos parece, para expresar nuestra opinión más benigna, el error más monstruoso”. 

Objetivamente la misa nueva es mala  y peligrosa para la fe, y la cuestión es si se puede o debe asistir a ella para cumplir el precepto que manda oír misa los domingos y días de fiesta.

Por ello, sin perjuicio de aplicar lo que se dice en el lugar correspondiente de estos apuntes respecto a la “comunicatio in sacris” y los principios correspondientes, debemos equipararla a la misa válida de cismáticos y/o herejes, y señalar los preceptos que el Magisterio tiene dados sobre el particular:

“El católico debe abstenerse de asistir a la misa válida, pero ilícita, del sacerdote hereje o cismático, aunque urja la obligación de oír misa por ser día de precepto y tenga que quedarse sin ésta al obrar así” .

Subjetivamente el problema se debe resolver así:

1) quien tenga conciencia cierta e informada de que el nuevo rito no es católico, sino que está protestantizado y que por lo tanto entraña peligro de que la fe se debilite o pierda, está obligado a evitarla  y a frecuentar sólo la misa tradicional, aún a costa de grandes sacrificios, y en caso de no poder hacerlo, aún está obligado a santificar el domingo o día de fiesta,

2) en la medida de esa conciencia, si a pesar de conocer el peligro, asiste a la misa con la sola intención de cumplir el precepto dominical, lejos de satisfacerlo, peca contra la fe,

3) quien tenga dudas o se halle perplejo sobre la bondad de la nueva misa está obligado a informarse para salir de las dudas, porque a nadie le es lícito obrar en estado de conciencia dudosa en este tema,

4) quien posea una conciencia venciblemente errónea sobre este asunto de la misa ha de corregirla y, por lo tanto, el que pueda instruirlo y esclarecerlo tiene a su vez, el deber de hacerlo,

5) al que tiene conciencia invenciblemente errónea es incorregible, y debe dejárselo en manos de la providencia divina, 

6) para los demás supuestos en que uno puede verse obligado a asistir a la nueva misa por algún compromiso grave e ineludible, remitimos a nuestra compilación de los principios dados por Monseñor Lefebvre al respecto, y que se encuentran en el trabajo indicado en nota de la página anterior,

7) en cuanto a si, no estando obligado a cumplir el precepto yendo a la misa nueva, y no teniendo la Misa tridentina en el rito latino, hay un deber de asistir a la misa de rito oriental católico, se responde que per se no hay tal deber. Y la razón es que, en la confección y recepción de los Sacramentos cada uno está obligado normalmente a las prescripciones litúrgicas que regulan la vida sacramentaria: los latinos al rito latino (cn. 732 §2). Así tanto el que celebra como quien participa de la Santa Misa deben hacerlo en el rito al que pertenecen, aunque, como excepción, el fiel puede cumplir el precepto en un rito católico distinto del propio como hemos dicho (canon 1249) y comulgar por devoción del mismo modo (canon 866 §1). Per accidens puede quizás existir el deber de asistir a Misa en un rito que no es el propio para cumplir con el precepto anual de comulgar, pero esto no es evidente.
***

Del "Breviario sobre la Hermandad San Pío X":

¿Por qué los católicos deben abstenerse de la Nueva Misa?

a) la crítica al “nuevo rito”10 no puede ser una crítica a la misa en sí misma, pues ésta es el verdadero sacrificio de Nuestro Señor legado a su Iglesia, sino un examen sobre si se trata de un rito o ceremonial conveniente para encarnar y realizar este augusto sa­crificio. (Nótese que la validez de una misa y la conveniencia de su rito son dos cuestiones diferentes, como resulta evidente en el caso de una misa negra.)

_______________
10 Consideramos equivalentes las expresiones “nuevo rito”, “nueva Misa”, “Misa de Pablo VI”, “Novus Ordo Missae”, etc., en referencia a la reforma litúrgica de 1969.