viernes, 19 de abril de 2013

NOTICIAS DE LA PONTIFICIA UNIVERSIDAD (JUDEO) CATÓLICA ARGENTINA




Durante más de 30 años me desempeñé como docente en la Universidad Católica Argentina  y no tengo memoria de que haya existido acto alguno en conmemoración de las mártires de la guerra española y de los cristeros. Tampoco me acuerdo de que se haya evocado a los 150 millones de muertos por el comunismo chino o de los 25 millones del comunismo soviético. Y desde hace unos cuantos años tampoco se evoca a Carlos Alberto Sacheri, asesinado por la guerrilla en diciembre de  1974.Antes su retrato ocupaba un lugar destacado en el edificio de la Facultad de Derecho, pero ahora no se lo ve. Seguramente esté en algún recoveco, lejos del paso de los estudiantes, no sea cuestión de que se interesen por el ilustre muerto, en razón de su “fascismo” y de su “integrismo”, atentatorios de la “corrección política”.
Pero lo que sí se advierte desde la gestión del ex Gran Canciller, Jorge Mario Bergoglio y del ex rector Alfredo Zecca, es la progresiva judaización de la Universidad, giro que culminó con el otorgamiento del doctorado honoris causa al rabino Abraham Skorka-defensor del “matrimonio igualitario”-  cuyo único mérito científico era la amistad con el Gran Canciller Bergoglio. (Ambos comparten la autoría de un lamentable panfleto judeo- cristiano).
No obstante, la cosa no paró allí, porque el miércoles 17 la Cátedra Juan Pablo auspició en el Auditorio Monseñor Derisi la presentación de “Historia de la Solución Final” libro del Juez (y verdugo) Federal Daniel Rafecas, sujeto que mantiene en inicuo y cruel cautiverio,-mediante ilegítimos procedimientos- a quienes salvaron a la patria de la dominación marxista-leninista(No hace falta explicar cuál hubiese sido el destino de la UCA si los Montoneros o el ERP hubiesen tomado el poder…)



¿Con qué autoridad moral puede entonces hablar Rafecas, de la tragedia sufrida por el pueblo judío, tema que, por otra parte, tiene amplia difusión mundial y que ha borrado de los medios a muchos millones de víctimas más que no eran judíos?
Lo más triste es que los profesores reputados como buenos católicos-algunos de ellos dicen ser tradicionalistas-no levanten una enérgica  protesta ante semejantes vejaciones morales e intelectuales. Sin duda, se trata de un extraño caso de autoemasculación.

Nota catapúltica:
Resulta paradójico que uno de los panelistas invitados para referirse a la “Solución Final” fuese el abogado abortista Marcos Azerrad, que en su libro Aborto: despenalización o no, un debate necesario, afirma:
“La experiencia indica que, en la mayoría de los países que han legislado sobre despenalización parcial del aborto, lo hicieron -precisamente- incentivando programas de educación sexual para adolescentes y proyectos de planificación familiar para permitir, y poner los métodos anticonceptivos, al alcance de todas las parejas. Los estudios y experiencias internacionales sobre base de antecedentes de estricto rigor científico demuestran, claramente, que el aborto es utilizado como último recurso, vale decir, cuando han fallado todos los mecanismos anteriores para evitar el embarazo. Por ello considero oportuno que la cuestión abordada, sea sometida a una Consulta Popular no vinculante(tal como lo propuse al Ministerio de Justicia y Derechos humanos de la Nación en fecha 26 de Junio de 2006), previo a la realización de un debate amplio y participativo del conjunto de la sociedad, con la intervención efectiva de la ciudadanía, de las Universidades Nacionales, de los Colegios Profesionales, de las ONG, como así también acompañada con una profunda reflexión, compromiso y participación jurídica de los especialistas en la materia. Por lo tantodenunciamos, una vez más, que los abortos en condiciones de riesgo, clandestinos e inseguros , constituyen una práctica que merece nuestra reprobación y condena, donde la mujer paga un tributo muy caro, con la secuela de muertes, esterilidad y complicaciones. El debate constituye un imperativo ineludible e impostergable, donde se deberán analizar todas las modificaciones legislativas posibles, cuyo objetivo primordial debe estar orientado a prevenir los miles de abortos clandestinos e inseguros que se producen anualmente (aproximadamente 800.000 por año), con sus gravísimas consecuencias y priorizando esencialmente los Derechos Humanos de la Mujer (argumento arts. 75 inc. “22″ y concordantes de la Constitución Nacional)”
(La cifra de los 800.000 abortos clandestinos es una mentira grande como una casa)