La FSSPX quiere formar parte de esta iglesia...
●
El buen grano y la cizaña.
Este
club aborda problemas doctrinales. Pero la doctrina católica no puede,
por definición, mezclar la cizaña y el buen grano: la doctrina de la
Iglesia es santa. El siguiente argumento es usado por el padre Lelong y por
Monseñor Fellay para justificar un acercamiento doctrinal: “No hay que
sorprenderse nunca de encontrar la cizaña mezclada con el buen grano en los
mismos católicos.” (Pág. 15) y Monseñor Fellay escribió en su respuesta
a los tres obispos: “Es Nuestro Señor mismo quien nos hace comprender
con su parábola de la cizaña, que siempre habrá, sea en una forma o en otra, la
mala hierba que arrancar y combatir en su Iglesia…” (14 de abril de
2012).
El
compromiso doctrinal sobre los puntos no negociables es justificado hábilmente por
esta parábola de la cizaña y el buen grano, pero si ella significa que hay
hombres de Iglesia falibles, eso no puede excusar que se tolere el error cuando
se discute de doctrina con ellos. Cuando se discute de doctrina, se trata de la
fe. Y en materia de fe, ninguna cizaña puede tolerarse, ningún compromiso,
ninguna ambigüedad, ninguna negociación es posible.
Sin
embargo, en el GREC los cerebros brillantes tienen hallazgos llenos de
originalidad. ¿Sabía usted que uno de los miembros del GREC inventó (pág. 122)
la noción de “doctrina extraordinaria”, la cual podría venir a
completar felizmente la “doctrina ordinaria”? Esta
invención da a entender que habría entonces verdades de fe que serían menos
obligatorias que otras. Para saber quién ha formulado este concepto
herético, no se pierda la tercera parte de este artículo.
●La
légítima discusión
El
ecumenismo modernista no excluye la “legítima” discusión, no niega las
divergencias doctrinales. Lo que cuenta es “hacer unidad”, “hacer
Iglesia” y “estar en comunión”. Este es el deseo del padre
Lelong: “Para esta tarea (de reformar, de restaurar), nada
es demasiado. También serán preciosos los lugares donde, en Iglesia y
en la confianza recíproca, será posible oponerse mutuamente a objeciones
razonables, susceptibles de hacer avanzar el Reino”.
Este
es el deseo de la señora Pérol: “la amenaza es interna cuando los
católicos están divididos entre ellos en lugar de estar unidos, en el respeto
de las legítimas diversidades”. (pág. 94)
Para
la señora Pérol, las orientaciones de la Iglesia conciliar son una “legítima
diversidad”, igual que nuestras orientaciones.
¿“Legítima
diversidad” entre nosotros y los conciliares?
Monseñor
Fellay desea también tener discusiones desapasionadas entre personas de
sensibilidades diferentes: “Es por eso que es legítimo promover
por una legítima discusión el estudio y la explicación
teológica de las expresiones y de las formulaciones del Concilio Vaticano II y
del Magisterio que le siguió, en el caso donde ellas no parezcan conciliables
con el Magisterio anterior de la Iglesia.” (Declaración doctrinal del
15 de abril de 2012). ¡Monseñor Fellay ni siquiera está seguro que haya materia
de oposición! Esta se une a la 1era condición del capítulo general de la FSSPX
pidiendo al Papa la libertad de crítica.
Todos
los santos afirmaron al contrario, la necesidad de separarse y de denunciar los
hombres de Iglesia herejes. El Padre Rioult hizo un
excelente artículo a este respecto:
El
delicado san Francisco de Sales declaró en su Introducción a la vida
devota: “Los enemigos declarados de Dios y de la Iglesia deben ser censurados y
sancionados con toda la fuerza posible. La caridad obliga a gritar por el lobo,
cuando un lobo se desliza en medio del rebaño e incluso en cualquier lugar
donde se encuentre”.
San
Luis María Grignion de Monfort notó: “Dios ha puesto una enemistad, no
solamente entre María y el demonio, sino entre el linaje de la Santísima Virgen
y el linaje del demonio: Es decir que Dios puso enemistades, antipatías y odios
secretos entre los verdaderos hijos y servidores de la Virgen y los hijos y
esclavos del diablo; ellos no tienen amor mutuo, no tienen correspondencia
interior los unos con los otros” (Tratado de la verdadera devoción §
51-59).
San
Atanasio dijo: “Así
pues, entre más ellos (los herejes) se esfuerzan por ocupar los lugares de
culto, más se separan ellos de la Iglesia. Ellos pretenden representar a la
Iglesia; en realidad, ellos se expulsan a sí mismos y se extravían. Los
católicos fieles a Dios en la santa Tradición, aunque sean reducidos
a un puñado, ellos son la verdadera Iglesia de Jesucristo”.
● orar juntos y
montar la base para abrir el camino a la jerarquía.
En
el GREC se ha desarrollado la amistad: “como todas las reuniones del GREC,
esta conferencia-debate se desarrolló en un clima de respeto mutuo y confiable
amistad”. Se dieron cuenta que “las convergencias doctrinales
y espirituales eran mucho más numerosas que las divergencias”.
En
el GREC les encanta orar juntos: durante un coloquio (secreto) del GREC, el
obispo referente, Monseñor Breton ha dirigido la oración de apertura y el Padre
Lorans la oración final. (pág. 46). El GREC se presentó como una simple reunión
de buenas voluntades deseosas de dar ejemplo de caridad fraterna como las
reuniones parroquiales católicas-protestantes. Veremos que no era nada de eso y
que los cardenales en Roma y Monseñor Fellay en Menzingen, seguían todo muy de
cerca.
Esta
discreción tan apreciada para el GREC fue retomada como método de trabajo por
Monseñor Fellay en sus conversaciones con Roma.
2)
El GREC prepara explícitamente la adhesión de la FSSPX a Roma.
El
plan del GREC es el testamento espiritual del señor M. Pérol (fallecido
en 1995), plan que su esposa aplicó al crear el GREC. Esto es lo que escribió
el señor Pérol: “Yo me atrevo entonces a exponer, con toda libertad,
algunas ideas con la esperanza que ellas pudieran servir a las autoridades
responsables que buscan, bajo la inspiración del Espíritu Santo, el
camino de la reconciliación” (pág. 21).
El
testamento espiritual del señor embajador Pérol, desarrolla de manera
premonitoria todo el tenor de las negociaciones entre la FSSPX y Roma. Se
trata de una guía que han seguido Roma y Menzingen.
-Por
parte de Roma, el señor Pérol preconizó revisar “el destino de la misa
de San Pio V”… Y Roma ideó el hábil Motu Proprio que
logró de un golpe abrogar oficialmente el rito de San Pío V como forma
ordinaria de la Iglesia y hacer creer que se liberaba la misa en latín. El
señor Pérol escribió también: “las medidas de la excomunión deben ser
suspendidas”… Y he aquí que en una carta del 9 de julio de 2008, los
animadores del GREC, entre ellos el padre Lorans, piden oficialmente
obtienen el levantamiento de las excomuniones. Esta carta del 2008 evoca
la “necesaria reconciliación”, es decir, un acuerdo práctico sin
acuerdo doctrinal. El 20 de octubre, nueva carta firmada por la FSSPX
que evoca la “regularización canónica”, expresión
ridícula retomada por Monseñor Fellay ulteriormente (ridícula y malvada,
porque no se trata de un problema jurídico sino de un problema de fe).
-Por
parte de la FSSPX, el embajador escribió: “Ecône debe decir claramente que
no rechaza el concilio en bloque”… Y Monseñor Fellay profesa
solemnemente en la declaración doctrinal: La completa Tradición de
la fe católica debe ser el criterio y la guía para la comprensión de las
enseñanzas del Concilio Vaticano II, el cual a su vez, ilumina –es decir
profundiza y explica ulteriormente- ciertos aspectos de la vida y de la
doctrina de la Iglesia, implícitamente presentes en ella, y aún no formulados
conceptualmente. Monseñor Fellay reconoció el “Misal romano y
los Rituales de los Sacramentos legítimamente promulgados por los Papas Paulo
VI y Juan Pablo II”. Y promete “respetar la disciplina
común de la Iglesia y las leyes eclesiásticas, especialmente aquellas que están
contenidas en el Código de derecho canónico promulgado por el papa Juan Pablo
II (1983)”. Él reconoció la validez del nuevo Código de derecho
canónico que es la traducción jurídica del concilio Vaticano II. El embajador no pedía tanto.
¿El
GREC es un club privado o un club ligado a las más altas autoridades de la
Iglesia?
El
GREC es un club privado, la consigna es: “Sean prudentes, permanezcan
discretos, no hablen de su iniciativa a los medios” (pág.
29). El reclutamiento se
hace por cooptación. ¿Significa esto que es un club cerrado? ¿Quién lo sabe?
Los
trabajos del GREC son seguidos de cerca por las más altas autoridades: No se
trata solamente de discusiones privadas como quieren hacernos creer. Se trata
de una verdadera empresa ecuménica de adhesión a Roma.
¿Esta
es una voluntad deliberada del GREC? Sí porque escribe el Padre Lelong: “Desde
que nuestro proyecto comenzó a tomar forma, nuestra preocupación fue el
informar a las autoridades religiosas a quienes concierne: el Nuncio apostólico
en París, al presidente de la Conferencia episcopal de Francia y al Superior de
la FSSPX”.
-El
Nuncio Baldelli recibió “numerosas veces, para conversaciones profundas” a
la señora Pérol, al Padre Lorans y al Padre Lelong. El nuncio escribió al
GREC: “Tuve recientemente la ocasión de hablar de sus actividades a Su
Eminencia el Cardenal Darío Castrillón Hoyos, presidente de la comisión
pontifical Ecclesia Dei. Está completamente dispuesto a recibir a un
representante de su grupo de trabajo” (2002). Así, mientras
que divierten a los fieles de la Tradición con editoriales antimodernistas,
discretamente discuten entre hermanos. En el 2003, el nuncio escribió al
GREC: “Las sugerencias propuestas a la FSSPX me parecen muy oportunas”. Un
trabajo de adhesión al más alto nivel está operándose a las espaldas de los
fieles. Y esto continuará con Monseñor Ventura que tiene a Roma al
corriente.
-Los
obispos de Francia designan a un obispo para seguir los trabajos, Monseñor
Breton. ¡Mientras que se re-confirma bajo condición en los prioratos de
la Tradición, un obispo modernista sigue los trabajos del GREC sin que esto
moleste a los participantes de la FSSPX!
-Monseñor
Fellay estableció con el GREC “relaciones que fueron siempre muy
confiadas” (pág. 35).
- “el
Cardenal Ratzinger, entonces prefecto de la Congregación para la Doctrina de la
Fe, fue puesto al corriente de nuestras actividades” Pág. 48.
-Múltiples
personalidades son solicitadas. El Padre Lelong escribió: “No es
posible citar aquí todos los correos que fueron intercambiados entre el GREC y
algunas personalidades del Vaticano”.
Las
más altas autoridades están, entonces, al corriente y siguen estas conversaciones
discretas realizadas por algunos sacerdotes de la FSSPX sin ningún
mandato del Capítulo general de la FSSPX y a espaldas de los sacerdotes y
fieles de la Tradición.
Continúa.