Nota Syllabus:
Mientras
“canoniza” a quienes llevaron a cabo la revolución satánica dentro de la
Iglesia y no está dispuesto a ninguna reforma verdadera para acabar con el
cáncer de la Iglesia (Vaticano II, Nueva Misa, Libertad religiosa, Ecumenismo,
etc., etc., etc.), Francisco a su vez consagra el Vaticano a San Miguel
Arcángel. Bendiciendo una escultura del Arcángel (no demasiado, viril, por
cierto, sino más bien todo lo contrario), da una “imagen” y hace un “gesto” que
a algunos les parecerá esperanzador. Pero no se trata sino de una nueva muestra
del doble juego liberal. ¿Qué significa el diablo para Francisco? ¿Acaso todo
lo que representa la Tradición católica? ¿Cómo puede ser enemigo del diablo y
andar a los abrazos con quienes son sus hijos? ¿Por qué no regresa a la oración
exorcismo de León XIII que rezamos al final de la Misa tradicional? Bergoglio
siempre fue un hábil político que sabía muy bien los gestos que debía hacer en
público. Pero ya sabemos también que el demonio puede disfrazarse de ángel de
luz para mejor engañarnos.
Por
cierto que a pesar de todo esto, Dios obra por encima de los hombres y escribe
derecho sobre renglones torcidos. Y de todo esto sacará un gran bien para
aquellos que se mantengan fieles a Él. San Miguel Arcángel hará la limpieza
prevista cuando sea el tiempo que Dios sabe.
CON
LA PRESENCIA DE BENEDICTO XVI
Francisco
consagró el Estado Vaticano a San Miguel
Fue
durante la inauguración de una estatua del Arcángel, defensor de la fe y
custodio universal de la Iglesia. El Papa Emérito llegó poco antes del inicio
de la ceremonia, invitado por el Santo Padre, y permanecieron juntos durante
todo el encuentro.
Religión
Digital
El
Santo Padre Francisco comenzó sus actividades públicas en la mañana del viernes
inaugurando la estatua de San Miguel Arcángel, protector de la Iglesia
Universal y patrono del Estado de la Ciudad del Vaticano en la plaza del
Gobernatorato. La escultura, que será colocada en un área de los Jardines
Vaticanos cerca del Palacio del Gobernatorato, es una obra monumental
comisionada por el Presidente emérito de este dicasterio, el Cardenal Giovanni
Lajolo, para celebrar al Arcángel Miguel, defensor principal de la fe y
custodio universal de la Iglesia.
Su
autor es el artista Giuseppe Antonio Lomuscio, ganador del Concurso
Internacional convocado por el mismo Gobernatorato del Estado de la Ciudad del
Vaticano, según el juicio autorizado de una Comisión de expertos presidida por
el Director de los Museos Vaticanos, el Prof. Antonio Paolucci.
Este
monumento, que supera los cinco metros de altura, se configura en un grupo
escultórico realizado en bronce con la técnica de la fundición a la cera
perdida. El basamento ha sido realizado en travertino romano, ideado también
por el artista y caracterizado por la presencia de bajorrelieves en bronce.
Como
explicó el vocero de la Santa Sede, el Padre Federico Lombardi, el Santo Padre
además de inaugurar este nuevo monumento procedió a la consagración del Estado
de la Ciudad del Vaticano a San José y a San Miguel Arcángel. Poco antes del
inicio de esta ceremonia llegó el Papa emérito, Benedicto XVI, invitado por el
Papa Francisco, quien fue saludado con gran afecto por los presentes y por el
personal del Gobernatorato.
Inmediatamente
llegó el Papa Francisco quien abrazó con afecto a Benedicto XVI y permanecieron
juntos durante toda la ceremonia. Después de un breve saludo del Cardenal
Giuseppe Bertello, Presidente del Gobernatorato, y de la intervención del
Cardenal Presidente emérito, Giovanni Lajolo, quien ilustró el significado del
nuevo monumento y de la fontana dedicada a San José, que fue inaugurada
anteriormente, el Santo Padre dirigió unas palabras y sucesivamente rezó dos
oraciones de consagración impartiendo, en fin, la bendición apostólica a toda
la asamblea.
Entre
los presentes se destacan, además de los artistas autores del nuevo monumento
(Giuseppe Antonio Lomuscio) y de la fontana (Franco Murer), los benefactores
que han sostenido esta realización junto a otros invitados y al personal del
Gobernatorato.
Nota Syllabus:
Curiosamente, Vatican Insider titula esta información: "Francisco y Benedicto consagran el Vaticano a San Miguel" (ver acá) ¿Cómo es esto posible? ¿Qué idea se quiere instalar en los católicos conciliares y mundanos? ¿Hay dos Papas y los dos consagran? Allí incluso llega a decirse que “Para el Papa
Bergoglio, Ratzinger es como el “abuelito” del Vaticano” (sic). ¿Será que Francisco los descoloca y los saca de agenda, tal vez porque tenga una "agenda" que cumplir imprevisible o de la cual muy pocos pueden dar cuenta? Como sea, la agenda de la destrucción total del Papado continúa a toda marcha.