Padre
Nicolas Pinaud
IIII IIII
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IIII IIII IIII II día de detención en la fortaleza de Jaidhof
Priestbruderschaft St Pius X
Jaidhof 1 A
3542 GFÖHL, NÖ
Austria
El 10 junio de 2013,
« Encerrado
en un apretado calabozo del Palazzo della Signoria, acostado sobre la tierra
desnuda, sin paja ni luz, los pies en el cepo, las cadenas en las manos, el
brazo izquierdo dislocado y roto por la tortura, tan adolorido que a veces
había que llevarle la comida a la boca pero sin odiar a nadie, sin maldecir a
nadie, conservando toda su magnanimidad, toda su bondad, toda su fe, al punto
de tocar a su carcelero y tratar de llevarlo, a él y a su hija, hacia la
perfección de la vida cristiana, Savonarola tuvo todavía la fuerza de tomar la
pluma para poner por escrito, casi en un trazo, entre el 26 de abril y el 8 de
mayo de 1498, el grito desgarrador y sublime de su último “Miserere”, y de
conceder de repente a las palabras del salmista, que la voz de la liturgia
repite desde hace quince siglos, un eco de una belleza tan punzante, de un
acento tan directo, de un candor tan absoluto, como puede merecer perpetuarse a
través de los siglos como una de las más puras y más emocionantes
imploraciones de la piedad cristiana”.
Estén
seguros que esta cita de la Introducción a la Última Meditación de
Savonarola por el cardenal Jounet, no ilustra para nada mi situación.
Y sobre todo que nadie la traduzca al alemán para publicarle en yo no sé cuál
sitio, porque el humor es muy diferente según la latitud y ¡provocaría por aquí
movimientos de humor que me valdrían el tratamiento de Savonarola!
Los
días se pasan monacalmente ocupados esencialmente al estudio. Mi proceso me ha
sido anunciado para la Natividad de San Juan Bautista (24 de junio), ¡Es
preferible a su Degollación (29 de agosto)!
Comprendo
la perplejidad de algunos de ustedes que me compartieron su dificultad de creer
lo que escribí en mi carta precedente, a saber que “Ahora dispongo de un cierto
número de mensajes firmados con mi iniciales, enviados a partir de una
dirección electrónica a mi nombre [nicolas_pinaud@yahoo.fr],
a ciertas personas, algunas conocidas y otras desconocidas”
Lo comprendo. Pero los hechos
son los hechos. Aquí algunos de esos mensajes enviados
desde esta dirección nicolas_pinaud@yahoo.fr creada
el 3 de marzo de 2013.
Esta
dirección fue utilizada ese mismo día a las 22:19 horas para enviar el mensaje
siguiente a yo no sé cuántas personas:
« El
tornillo se aprieta cada vez más. Estamos en la mira de Menzingen e incluso de
Suresnes… ¡Pero yo no
rendiré las armas! ¡Animo! NP »
Al
menos un cofrade ha sido engañado y respondió con un mensaje (¡que yo no
recibí!) a este falso mensaje (¡que yo jamás envié!).
El
6 de marzo de 2013 a las 13:47 horas, este mismo mensaje fue enviado a partir
de esta misma dirección a otros destinatarios, sacerdotes y laicos. Un laico
por lo menos fue engañado y mostró preocupación a mediados de marzo. Un oficial
de la justicia me entregó el mensaje recibido y su respuesta… ¡que
evidentemente no recibí!
El
mismo día 6 de marzo, Monseñor Williamson recibió también de la misma dirección
[nicolas_pinaud@yahoo.fr] el
siguiente mensaje que yo no escribí ni envié:
« Estimado
Monseñor, parecería que la dirección del padre Rioult ha sido hackeada. Si
usted tiene documentos que quiera hacerle llegar, envíemelos a mí y yo se los
enviaré. (En particular
el trabajo en curso). Ánimo. ¡Venceremos ! Deseándole
una santa cuaresma, le aseguro, estimado Monseñor, mis oraciones fieles. N.
Pinaud”.
Monseñor
Williamson, engañado por este falso mensaje, me dirigió una respuesta que jamás
recibí… ¡con razón! Fue un oficial de justicia que me lo comunicó hace algunas
semanas…
Yo
no sé cuántas personas han sido engañadas por esta difusión urbi et
orbique, por lo menos es una falta a la justicia. Si usted es de esas
personas, hágamelo saber. Continuaremos con este asunto.
¡Los
informes de la peregrinación que me llegaron, eran más bien dolorosos, pero me
parece que el sermón del domingo pudo hacer olvidar el frío y la lluvia algunos
minutos!
"...
La Iglesia conciliar, es decir, esta secta que ocupa la Iglesia Católica.
Es una ventaja para nosotros ser considerados como excluidos, como en el exilio
... "
¡Por
fin, un poco de visibilidad en la niebla persistente!
Nicolas
Pinaud
