jueves, 31 de diciembre de 2020

CON EL ABORTO LA MUJER SE CONDENA A SÍ MISMA

 


Porque Adán fue formado primero y después Eva. Y no fue engañado Adán, sino que la mujer, seducida, incurrió en la transgresión; sin embargo, se salvará engendrando hijos, si con modestia permanece en fe y amor y santidad.

I Tim. 2,15.

 

La vocación de la mujer es la maternidad que también puede extenderse, en sentido espiritual, a las almas que se entregan al apostolado o al servicio de los que sufren. Cf. Ez. 3, 19 y nota. 

Comentario de Monseñor Straubinger.