Número
CDLII (452)
12 de
marzo de 2016
Paz,
Guerra
Mons. Williamson
Lo
poco en nuestro poder, hagamos, entonces Dios
Podrá
escatimar por eso la vara que bien merecemos.
He aquí algunas pequeñas
buenas noticias y algunas grandes malas noticias, pero el balance puede ser
remediado un poco por ser las malas noticias del mundo mientras que las buenas
noticias son de la Iglesia. Primero las tres buenas noticias.
A principios de Febrero en
el Seminario “Resistente” de San Grignion de Monfort cerca de Angers en
Francia, hubo una reunión de la media docena de sacerdotes franceses de la
Unión Sacerdotal Marcel Lefebvre, USML para abreviar. Monseñor Faure presidió.
El Padre Bruno, monje benedictino, coordinó. La USML todavía no tiene
estructura de la cual valga la pena hablar -no más que lo hizo el remanente de
sacerdotes fieles sobreviviendo al desastre del NOM y del Vaticano II- pero
vigorosas discusiones sobre acción a tomar por el USML no impidió una reunión
de mentes. La Fe puede mantener a los amigos en USML juntos por un tiempo aún.
Después, al día siguiente,
cinco jóvenes, tres de Francia, uno de Inglaterra y uno de Italia, recibieron
la sotana de las manos de Monseñor Faure en una Misa Pontifical celebrada en la
iglesia del Convento de Frailes dominicos en Avrillé. Bajo el impulso de la
UMSL el Seminario abrió el otoño pasado con ocho seminaristas, de los cuales
uno solamente no está más allí. Ellos reciben una gran parte de su educación
diaria en el mismo Convento por los sacerdotes dominicos, quienes están así
devolviendo una deuda de sus propios orígenes a la Fraternidad de Monseñor
Lefebvre y al Seminario en Écône, donde sus tres pioneros, todavía sus líderes
de hoy, recibieron su educación inicial en filosofía y teología en los finales
de los 1970 y principios de 1980. Verdaderamente, “Se cosecha lo que se siembra”.
Pero de la Neo-Fraternidad de Monseñor Fellay, que se destina al infierno de la
Roma Conciliar, estos Dominicos se apartaron prudentemente el año pasado.
Y, la última parte de las
buenas noticias de Francia es que de ninguna manera todos los sacerdotes de la
FSPX en el Distrito de Francia están ciegamente siguiendo a su falso líder.
¿Cómo lo podrían ellos, cuando el actual jefe de la Roma Conciliar comete día a
día, de palabra y obra, una atrocidad tras otra contra la Fe Católica, como si
él estuviera resuelto a destruir la Iglesia entera? La Fraternidad de Monseñor
Lefebvre está tal vez hundiéndose, y puede aún hundirse en esta arrolladora
tormenta de liberalismo y neo-modernismo, pero todavía no se ha hundido.
Debemos rezar a Monseñor Lefebvre en caso que él pueda salvar su Fraternidad de
los liberales engañados en cuyas manos ella ha caído.
La mala noticia del mundo
(ver http://www.tfmetalsreport.com/blog/7422/dangerous-moves-new-cold-war)
es
que la Guerra Fría entre Occidente y Rusia se está calentando nuevamente y
deviniendo más peligrosa que nunca desde la crisis cubana de misiles en 1961.
En particular, a fines de Enero, el gobierno de los Estados Unidos anunció su
decisión de poner una brigada de combate completamente equipada, móvil pero
permanente, en los países de Europa del Este lindando directamente con Rusia,
desde los Estados Bálticos para abajo hasta Siria. Nunca la fuerza militar de Estados
Unidos ha sido puesta tan cerca de Rusia. La más cercana previa fue Berlín. Y
la carrera de las armas está de vuelta. Ambos lados están modernizando sus
armas nucleares, ahora mucho más costosas y peligrosas, siendo más pequeñas,
más precisas, más controlables y por consiguiente más “usables”. El reloj
nuclear está haciendo tic-tac – a 11h57, dicen algunos – y no hay debate.
¿Cómo pueden los medios
Occidentales no hacer saber de una situación desarrollándose tan
dramáticamente? Es porque ellos están controlados por los enemigos de Dios y
del hombre que quieren la Tercera Guerra Mundial que les dé a ellos la
dictadura global a la cual están convencidos que tienen derecho. ¿Hay una
esperanza humana para pararlos de infligir sobre todos nosotros su locura
criminal? No depende de ellos, sino de Dios a quien ellos están sirviendo como
un flagelo para nosotros, humanidad que ha rechazado a su Dios. Que cada uno de
nosotros rece el Rosario y cumpla con sus deberes diarios. Podemos hacer muy
poco más. Podemos hacer nada menos.
Kyrie eleison.