Weltbild,
un grupo editorial que posee en Alemania el mayor negocio de ventas online de
libros después de Amazon, se declaró en enero de este año en insolvencia. Su
declive no puede atribuirse solamente a la competencia, sino también a los
escándalos protagonizados en años recientes.
Pues
aunque Weltbild pertenece en su totalidad a la Iglesia católica, su catálogo
incluía libros pornográficos comoInternado de putas, Ramera de
abogados, Bar de follar, Ponme cachondo, por
mencionar algunos de entre más de 2.500 títulos. Este hecho lo denunció la
prensa en el año 2011, en base a informaciones proporcionadas por PURmagazin,
una revista que aglutina a católicos conservadores, mencionando que ya en el
año 2008 se había originado una iniciativa de laicos llamada “Katholisches!
Welbild”, que envió cartas a todas las diócesis alemanas denunciando esta
circunstancia. Salvo la arquidiócesis de Colonia, que decidió ceder su
participación en Weltbild a la Asociación de Diócesis de Alemania, las otras
hicieron caso omiso.
Y
el problema no eran sólo libros de este talante. Weltbild vendía además libros
a favor del esoterismo, la magia, el satanismo, la violencia de extrema
derecha, etc. Aparentemente, para hacer negocio hay que vender de todo, aun
cuando se pertenezca a la Iglesia católica, que muchas veces ha puesto en juego
su credibilidad con incoherencias como ésta. Una incoherencia que le rendía
ganancias.
Los
libros problemáticos fueron retirados del catálogo. Tras intentos infructuosos
por parte de las principales diócesis alemanas de desprenderse de la editorial
y amenazas de entablar acciones judiciales por difamación —pues oficialmente
nunca se ha vendido pornografía sino erotismo—, Weltbild ha terminado cayendo
por su propio peso.
AL
RESPECTO PODEMOS RECORDAR TAMBIÉN LA VINCULACIÓN DE LA FSSPX DE MÉXICO CON UNA
ESPURIA EDITORIAL: http://syllabus-errorum.blogspot.com.ar/2013/08/san-pio-x-y-el-ano-de-la-fe-modernista.html