Resulta
esta imagen pintada por Roberto Giacaman y colocada detrás de donde Francisco
ofició misa en Belén en la Iglesia de la Natividad. En vez de los Tres Reyes
Magos, los tres papas del Vaticano II que visitaron Tierra Santa (Pablo VI,
Juan Pablo II y Benedicto XVI), en el pesebre junto al Niño Jesús, la Sma.
Virgen y San José.
Atemorizante
imagen porque por un lado, estos tres papas aparecen amenazantes, sus manos
parecen dirigirse hacia la Virgen María, Juan Pablo II la señala y Benedicto parece
llevar sus manos hacia su cuello, como si fuera a hacerle daño. Por otra parte,
esta imagen podría instalar lo que podría darse muy pronto: "tres papas" en Roma,
dos “eméritos” y uno reinante, pues de hecho Francisco dejó la puerta abierta a
una posible renuncia y últimamente ha debido suspender varias actividades debido
a su mala salud.