Número
CCCLXXXIX (389)
27 de diciembre de 2014
Realismo de Mons. Lefebvre – II
Mons.
Williamson
Hacia Roma un gran Arzobispo, sí, empujó.
Pero, ¿qué puede hacerse cuando las mentes
de los Romanos son papilla?
Doce semanas atrás (5 de octubre) el “Comentario
Eleison” presentó una primer serie de extractos de la última entrevista pública
de Monseñor Lefebvre, otorgada a la revista Fideliter a
principios de 1991. Aquí sigue una segunda y última serie de extractos,
ligeramente editados en aras de brevedad y claridad:—
P: ¿Qué conclusiones podemos sacar de la
Fraternidad San Pío X después de 20 años de su existencia?
R: Dios ha querido la continuación de la Tradición
católica. Estoy profundamente convencido que la Fraternidad es el medio que
Dios quiso para guardar y mantener la Fe, la verdad de la Iglesia. Debemos
continuar a mantener fielmente los tesoros de la Iglesia, esperanzados en que
un día ellos puedan reasumir el lugar que nunca hubieran debido perder en Roma.
P: Usted dice a menudo que, más que la
liturgia, es ahora la Fe la que nos opone a Roma moderna.
R: Ciertamente la cuestión de la liturgia y
de los sacramentos es muy importante, pero lo más importante es la cuestión de
la Fe. Esta no es una cuestión para nosotros. Tenemos la Fe de todos los
tiempos, la del Concilio de Trento, la del Catecismo de San Pío X, la de todos
los Concilios y de todos los Papas antes del Vaticano II. Por años ellos en
Roma han tratado de mostrar que todo en el Concilio era totalmente consistente
con esta Tradición. Ahora ellos están mostrando su verdadera cara al decir que
no hay más ninguna Tradición ni Depósito para ser transmitido. Tradición en la
Iglesia es lo que sea que el Papa está diciendo hoy en día. Usted debe
someterse a lo que el Papa y los obispos dicen hoy en día. Aquí está la famosa
‘Tradición Viviente’ de ellos que fue la única base para nuestra condenación de
1988.
Ahora ellos no tratan más de probar que lo que
ellos dicen es consistente con lo que Pío IX escribió o con lo que el Concilio
de Trento promulgó³. No, todo eso ya pasó; es anticuado como dijo el Cardenal
Ratzinger. Está claro, y ellos pudieron haber dicho eso antes. No tenía
ningún sentido nuestra conversación, nuestra discusión con ellos. Ahora
sufrimos a causa de la tiranía de la autoridad porque no hay más ninguna regla
del pasado.
Más y más están mostrando que estamos en lo
correcto. Estamos tratando con personas que tienen una filosofía
diferente a la nuestra, una manera de ver diferente, que están influenciados
por todos los filósofos modernos subjetivistas. Para ellos no hay verdad fija,
no hay dogma. Todo está evolucionando. Esto es realmente la destrucción
Masónica de la Fe. Afortunadamente, ¡tenemos nosotros la Tradición para
apoyarnos en ella!
P: Usted ha enfatizado que usted está
seguro que la Fraternidad está bendecida por Dios porque en distintas ocasiones
hubiera podido desaparecer.
R: En efecto. Ha sido una y otra vez el blanco de
ataques muy difíciles. Eso es muy doloroso, pero no obstante debemos creer que
la línea de la Fe y de la Tradición que estamos siguiendo, es imperecedera
porque Dios no puede permitir que Su Iglesia perezca.
P: ¿Qué puede usted decir a aquellos de los
fieles que aún tienen esperanza en la posibilidad de un acuerdo con Roma?
R: Nuestros verdaderos fieles, aquellos que han
comprendido el problema y que precisamente nos han ayudado a continuar a lo
largo del sendero derecho y firme de la Tradición y de la Fe, me dijeron que
los acercamientos que yo estaba haciendo hacia Roma eran peligrosos y que
estaba perdiendo mi tiempo. Con todo, yo esperaba hasta el último
minuto que en Roma presenciaríamos un poquito de lealtad, así que no se me
puede acusar de no haber hecho el máximo posible. Así, ahora también, a
aquellos que me dicen “Usted tiene que alcanzar un acuerdo con Roma”, pienso
que puedo decir que entonces fui aún más lejos de lo que habría debido ir.
Kyrie eleison.