sábado, 28 de mayo de 2016

PREGUNTAS





Para pensar. Apenas dos años y medio atrás, se producía el escandaloso incidente en la conmemoración de la “kristallnacht” en la Catedral metropolitana de Buenos Aires, cuando un grupo de sacerdotes y fieles de la FSSPX “interrumpieron” la ceremonia ecuménico-judaica que encabezaba el cardenal Poli (puede verse acá). Es para pensar: ¿cómo es que el rudo y cáustico periodista Tim Sebastian, que vapuleó a Mons. Fellay recientemente con un interrogatorio donde destacó el temario judaico, y hasta recordó un incidente muy lejano de Mons. Lefebvre por el cual fue condenado, ni siquiera mencionó este hecho, tan reciente y tan afrentoso para la sinagoga e incluso para la curia porteña y el mismo Bergoglio? Si la intención de Sebastian era “condenar” a Mons. Fellay y la Fraternidad, ¿no era lo más conveniente traer a cuento y rememorar en sus detalles tal acción propia de “nazis”, según dijeran los victimados de la misma? Sin embargo, Sebastian se centró en hacer que Fellay condenase al imperdonable Mons. Williamson. El periodista judío hizo  también que Mons. Fellay se distanciase de Mons. Lefebvre. Logró que Mons. Fellay fuera públicamente humillado, pero sin embargo no tocó el tema aquel. ¿Será que no resultaba conveniente para quien está a punto de pasar a formar parte de la iglesia-sinagoga conciliar? ¿Será porque aquella inusitada acción “quijotesca” fue pergeñada por quienes tendieron una trampa a la Fraternidad, con el fin de hacerle dar una señal de sumisión a la judeo-iglesia conciliar? Recordemos lo que decía un comunicado del Centro Simón Wiesenthal por aquel entonces: “Era de esperar que seguidores del fallecido cismático Marcel Lefebvre, quien se opuso a la abolición por parte del Vaticano de la acusación acerca de la responsabilidad judía en la Crucifixión, y del negador del Holocausto Richard Williamson, trataran de continuar su campaña antisemita. Eligieron Kristallnacht, la ocasión más sensible, para manifestar su odio. Felicitamos a Monseñor Poli por haberlos resistido. Como sucesor en la diócesis de Buenos Aires del Cardenal Jorge Bergoglio, conocido hoy como el Papa Francisco, está siguiendo el ejemplo de Su Santidad como un amigo del pueblo judío y un luchador contra la intolerancia”, destacó el Dr. Shimon Samuels, Director de Relaciones Internacionales del Centro Simon Wiesenthal”. Recordemos también que después de aquello el Superior de Distrito P. Bouchacourt salió a exculpar a los judíos del deicidio en el diario más importante de Argentina…y que a posteriori fue “ascendido” por Mons. Fellay, llevándolo de Superior a Francia. Es para pensar: ¿Cómo es que Tim Sebastian no le preguntó nada sobre este hecho escandaloso a Mons. Fellay?

Afiche publicado en el sitio de los “Judíos Argentinos Gays”. Hay que “aprender” de Francisco, ¿tal vez porque “es muy humano”, como dice Mons. Fellay?

Seguimos con las preguntas. ¿Cómo es que habiendo ocurrido esta tremenda afrenta en la mismísima casa de Bergoglio ahora este los quiere "reconciliar"? ¿Y cómo es que los neo-fraternitarios creen que la Sinagoga  y Bergoglio les van a perdonar este público agravio, por más que fuere incitado por las mismas “víctimas”? ¿No saben acaso que si hay algo que caracteriza a la Sinagoga es su espíritu vengativo anticristiano y su desconocimiento del perdón? ¿No recordamos acaso lo que pasó luego del “williamsongate”?


Otra pregunta: ¿cómo es que el cardenal Poli, poco más de un año posterior a aquel incidente, reconoció a la FSSPX en Argentina? ¿Será que la exculpación del deicidio a los judíos era el precio convenido para lograr tal “reconocimiento”? ¿O tendremos que pensar que fue un acto de la misericordia de Poli y Bergoglio? Curioso que tampoco se levantaran quejas por este hecho por parte de la Sinagoga, que sin embargo hizo gritar a los mass media del mundo cuando fuera el incidente con Mons. Williamson.


Card. Poli la noche del incidente. Luego reconocería a los “nazis”
 y “ultracatólicos”. Raro ¿no?


Nueva pregunta: ¿Cómo es que la Fraternidad San Pío X de Argentina pasó de tener fieles “ultras” que provocaron convenientemente para la Sinagoga aquel hecho extremista, a tener un feligrés que es un funcionario muy bien ubicado en el gobierno liberal pro-sodomita y  sionista de Mauricio Macri, plagado de judíos y donde hasta uno de sus ministros es el rabino masón Sergio Bergman, amigo de Bergoglio, presente aquella noche de la afrenta en la Catedral-Sinagoga? Incluso este funcionario “lefebvrista” (al que según nuestros informes se lo vio por última vez en el priorato de Buenos Aires en Navidad, quedándose al brindis posterior a la misa), incluso este funcionario, decimos, salió recientemente a decir que está dispuesto a debatir la legalización del aborto (véase también acá). Por esto último debe considerárselo un pecador público y deben denegársele los Sacramentos, ¿esto ocurrirá?  ¿O entra en la falsa misericordia de Francisco, ahora que los sacerdotes de la Fraternidad tienen la jurisdicción conciliar? ¿O será que ahora este funcionario liberal ha dejado de acudir a la Fraternidad y acudirá a alguna logia? ¿O a ambos lados?


Un “venezolano” macrista. No sabemos si el apretón de manos entre Nicolás Massot y Sergio Massa es un saludo masónico, pero estamos seguros de que es un saludo liberal. Massa fue candidato a presidente y es hombre de confianza de Washington. Y pensar que a Massot le dio su primera comunión el Padre Sánchez Abelenda...


En estos tiempos parece que todo puede discutirse. Dijo recientemente el Cardenal Kasper: Unas piden explícitamente el diaconato. Entonces, ¿por qué no discutirlo?”. Así este funcionario “lefebvrista” dice: “Estamos a favor de debatir el aborto y otras leyes por más controversiales que sean”. La gran excusa de Mons. Fellay para acordar con Roma es que ahora ellos aceptan “discutir” el Vaticano II. ¿Creerá que la verdad nace de la discusión? ¿O que la democracia parlamentaria es la mejor opción para la Iglesia? ¿O todo lo hace “por miedo a los judíos”?


Sergio Bergman, rabino masón, presente aquella noche en la Catedral. Hoy es compañero de Massot en el mismo gobierno.


Dijo aquella noche de los cristales rotos e interrumpidos en la catedral de Bs. As., el Cardenal Poli: Queridos hermanos judíos, siéntanse en su casa”, “Ustedes tienen que sentirse hoy en su casa, como nosotros nos sentimos a gusto en una sinagoga, así que bienvenidos. Que haya paz, shalom. Esta una ceremonia que siempre privilegió, que lo valora y tanto aprecia el Papa Francisco”, concluyó Poli. Poco tiempo después, al reconocerlos, es como si le hubiese dicho a la FSSPX algo parecido: “siéntanse en su casa”. Y Mons. Fellay no busca otra cosa que escuchar de labios de Francisco esas mismas palabras.

Dijo Mons. Lefebvre (7 de febrero de 1981): “La lucha salvaje e injusta llevada a cabo contra la Fraternidad por quienes se esfuerzan en corromper las fuentes de santificación de la Iglesia, no hace sino confirmar su autenticidad. Son los sucesores de Caín que quieren de nuevo matar a Abel, cuyas oraciones son agradables a Dios”. Ahora que vemos a la Fraternidad reconocida, con jurisdicción y a punto de obtener la “comunión plena” con los modernistas romanos, que son los sucesores de Caín, no podemos dejar de reconocer que esto no sería posible sin los sucesores de Judas, que sacrifican la verdad, a cambio de una prelatura y…una soga y un nudo en una rama.