sábado, 5 de diciembre de 2020

“EL OBJETIVO PRINCIPAL DE LA VACUNACIÓN NO ES LA SALUD”

 


Fuente

3 de diciembre de 2020

Philippe Guillemant trabaja en el CNRS, es especialista en Inteligencia Artificial, médico e ingeniero físico. Publicó esta tribuna de la que ofrecemos extractos aquí en la revista Nexus .

“El principal objetivo de la vacunación es lograr una estandarización del puerto de identidad digital por parte de cada ciudadano. De hecho se permitirá que el control de sus derechos de acceso a diferentes lugares (restaurantes, tiendas, estaciones, etc.) se haga de forma automática, lo que abrirá un enorme mercado, el de los objetos conectados, tan sabroso que resulta capaz de transformar a los informáticos en virólogos.

También permitirá la introducción de una moneda digital ya preparada por la eliminación gradual del efectivo.

Hay dos casos a tener en cuenta:

- Puerto de identidad digital no íntimamente ligado al cuerpo: móvil, pulsera, reloj, bolso, etc.

- Puerto de identidad digital íntimamente ligado al cuerpo: anillo, chip debajo de la piel, identificación genética...

En el segundo caso será imposible, salvo cirugía, deshacerse de su identidad.

Al principio, solo se debe considerar seriamente el primer caso. Es solo cuando el uso de una identidad digital se normaliza por el hábito (de vivir de manera diferente) que surge naturalmente el segundo caso para reforzar la seguridad del uso.

A día de hoy, este puerto de identidad digital ya se realiza a través de nuestros móviles, pero no se hace ningún uso de él, salvo marginal como es el caso de la aplicación TousAntiCovid. Toda persona tiene derecho a entrar a cualquier tienda y a viajar sin necesidad de tener un portátil. Por otro lado, el trazado de movimientos que permite un móvil es muy tosco, estando su precisión entre 1 y 10 metros. Podemos considerar que por el momento tener un celular es inofensivo.

Todo esto podría cambiar con el control automatizado de vacunas y la generalización de objetos conectados a través de 5G e incluso desde 4G. En particular, el rastreo ya no se llevaría a cabo mediante GPS, sino mediante el análisis y triangulación de señales a través de los objetos circundantes y, en última instancia, será de 100 a 1000 veces más preciso a medida que evolucione la tecnología.

El puerto no vinculado al organismo de identidad digital, en un entorno poblado por objetos conectados (casas, automóviles, carreteras, ciudades, etc.) permitiría las siguientes recopilaciones de datos por parte de una IA:

- Verificación de la autorización de acceso de los vacunados.

- Control de velocidad y aparcamiento (coche conectado).

- Identificación de todo tipo de infracciones de conducción.

- Identificación de personas con las que almorzamos.

- Memorización de todos los viajes.

- Cálculo tiempo de trabajo o tiempo de presencia…

- Detección de movimientos inusuales…

- Etc.

Cabe señalar que ninguna ley podría impedir la implementación de los algoritmos correspondientes, sino solo prohibir su uso.

[…]

Ahora considere el segundo caso y amplíe la lista anterior:

- Hogar inteligente (interacciones, comandos, diálogos...)

- Análisis de actividades privadas (dormir, leer, relaciones íntimas hombre- mujer...)

- Seguimiento de la actividad de los niños.

- Análisis de interacciones familiares.

-Análisis de situación (descanso, actividad, caída…)

- Análisis del comportamiento (gesto brusco, actividad deportiva…)

-Detección y memorización de hábitos.

- Etc.

Ciertamente lo olvido, sabiendo que es difícil imaginar de antemano todo lo que la Cuarta Revolución Industrial podría inventar para nosotros. Aquí solo estoy hablando de un transhumanismo muy leve, casi aceptable, sin referirme a nada intrusivo como un chip en el cerebro, nanobots en nuestras venas o visión artificial conectada. Pero no hace falta decir que la aceptación de estas tecnologías intrusivas está condicionada a la aceptación del uso de la identidad digital.

La cuestión de saber si realmente entraremos en este nuevo mundo o no, dependerá, por tanto, del nivel de aceptación de la vacuna. […] ”