Los
cristianos perseguidos están en el centro de la agenda de política exterior de
dos países del este, Hungría y Polonia.
El
17 de agosto, Pawel Jablonski, subsecretario del Ministerio de Relaciones
Exteriores de Polonia, y Tristan Azbej, el influyente secretario de Estado
húngaro, firmaron en Budapest un memorando polaco-húngaro sobre cooperación en
el transporte de ayuda humanitaria para la Ayuda a los cristianos perseguidos.
Jablonski
dijo tras la firma que esta ayuda iría a las comunidades cristianas reprimidas
en Oriente Medio, África y algunos países europeos.
Jablonski
aprovechó la oportunidad para anunciar también que el partido Ley y
Justicia (Pis) estará a la vanguardia en la protección de los
cristianos de todo el mundo y que está presionando a los aliados de Varsovia
para que se unan al frente creado por el húngaro Fidesz de Viktor
Orban. Ya se ha conseguido un primer resultado: en noviembre, la capital
polaca acogerá una conferencia sobre libertad religiosa apoyada por el gobierno
húngaro, a la que asistirá una delegación de la administración Trump. Esta
será una oportunidad, confirmó, para lanzar un llamado a la adopción de medidas
concretas de apoyo a los cristianos.
El
Subsecretario de Relaciones Exteriores de Polonia añadió:
“Cientos de millones de personas en todo el mundo son perseguidas todos
los días por motivos religiosos, por la fe que profesan. […] El acuerdo de
hoy entre el gobierno húngaro y el gobierno polaco es una prueba de que este
tema no ha sido olvidado. Polonia y Hungría, y esperamos que también otros
países, lucharán para que la persecución religiosa sea un problema que preocupe
a toda la comunidad internacional. "
El
memorando sienta las bases para el establecimiento de proyectos e iniciativas
conjuntos y / o coordinados conjuntamente en todas las regiones del mundo donde
se sabe que los cristianos son perseguidos, desde Oriente Medio hasta África,
pero también en Europa. En particular, los dos países se comprometen a
apoyar la lucha de los cristianos por la emancipación social y el acceso a
servicios e infraestructura esenciales, para desarrollar y llevar a cabo
programas educativos, culturales y de sensibilización en las sociedades en las
que están presentes conflictos interétnicos e interreligiosos, y prestar
especial atención a los más vulnerables de los más vulnerables, a saber, los
niños, los ancianos, las mujeres y las personas con discapacidad.
Francesca
de Villasmundo
DIRIGENTES DE HUNGRÍA,
POLONIA Y POLÍTICOS CONSERVADORES DE ITALIA
Soros tilda de enemigos internos de Europa a quienes se
oponen a la agenda del Nuevo Orden Mundial