“Defendiendo
que la caridad está por encima de todo, el catolicismo se ha defendido contra
el terrible “endurecimiento” de lo ritual, contra la propensión invasora del
automatismo. Cuando “se resfríe la caridad en muchos” sobrevendrá la espantosa
corrupción de lo religioso que Cristo llamó la Grande (y Última) Tribulación”.
Padre
Castellani, Diario, 1-8-1947.