"Ha llegado la nulidad
express para todos, el divorcio católico".
"El
Matrimonio católico tal como lo conocíamos hasta ahora ha sido destrozado ante
nuestras narices, justamente por aquel encargado de custodiarlo."
El Papa soluciona antes del Sínodo el problema
de la Comunión a los divorciados
No hace mucho escribí advirtiendo que debíamos
estar alerta porque el Sínodo no era lo que parecía, había objetivos de fondo
que se nos iban a colar por la puerta de atrás. Lo que nunca pude pensar es que
esto acaeciera antes del propio evento, y por la puerta delantera.
A unas semanas del inicio del Sínodo nos han
colado por la escuadra, con nocturnidad y alevosía, un gol de primera a todos
los católicos. Por iniciativa directa del Papa se ha resuelto de golpe
el problema de la comunión de los divorciados vueltos a “casar”, ya no habrá
más dilemas, porque sencillamente no habrá más divorciados… ha llegado la
nulidad express para todos, el divorcio católico.
No voy a entrar en toda la discusión
neocatólica de si este término era así o significaba lo otro, que si indicios,
que si causas, que si tal que si cual… todo eso importa poquísimo en el
magisterio de titulares de prensa que se hace hoy, que es el que se pretende
hacer -dicho sea de paso-, y del cual son víctimas la mayoría de eclesiásticos.
La realidad efectiva es que las nulidades, que de por sí ya eran un auténtico
pitorreo, han pasado a ser un café para todos, con lo que en la teoría
y en la práctica el Matrimonio católico tal como lo conocíamos hasta ahora ha
sido destrozado ante nuestras narices, justamente por aquel encargado
de custodiarlo.
Lo que más me sorprende es la absoluta falta
de reacción, nadie dice nada, nadie hace nada. Un silencio espesísimo domina
todo, las dotes teatrales se acentúan al extremo: todo sigue igual. La situación
es ya gravísima y requiere que con urgencia se posicione públicamente todo
aquel que tenga luz para ver, desde el laico al párroco, desde obispos a
cardenales, no podemos seguir como si no pasara nada. El silencio HOY
es complicidad. Ni falsa obediencia, ni que si me quitan mi parroquia,
ni gaitas… la defensa de Cristo, su doctrina y su Iglesia se antepone a todo en
el momento presente, y si usted por defender la Verdad se queda sin su
parroquia, sin su obispado, sin su puestito, pues bendito será en el Cielo, que
para eso se hizo sacerdote, para dar la cara por Cristo.
Decía con razón Dietrich von Hildebrand “¿Qué
hubiera ocurrido si, por ejemplo, en tiempos del arrianismo, en que la mayoría
de los obispos eran arrianos, los fieles se hubieran limitado a ser agradables
y obedientes a las ordenanzas de esos obispos, en lugar de combatir la
herejía?”
La situación es de una gravedad sin
precedentes. El sapo ha sido cocinado, servido y digerido.
Miguel Ángel Yáñez
Comentario del blog NP: ¿qué ha dicho Mons. Fellay
acerca de este gravísimo golpe de Francisco al matrimonio cristiano? Nada. ¿Por
qué? "Porque, por ejemplo, cuando dos países que están en guerra
intentan hacer la paz, es normal que suavicen las palabras" (respuesta
de Mons. Fellay a un fiel de Mendoza, Argentina, en octubre de 2012).