Número CDVI
(406)
25 de abril de
2015
¡La Cultura Importa!
Mons. Williamson
Vengan a
escuchar al Dr. White, si es todavía posible,
Para relacionar correctamente la verdadera Fe con el hombre moderno.
Para relacionar correctamente la verdadera Fe con el hombre moderno.
Desde el
Viernes 1ero de Mayo a la tarde hasta el Domingo 3 de Mayo al
mediodía, tendrá lugar aquí, en la Casa Reina de los Mártires en Broadstairs,
otra Sesión a cargo del Dr. David White, tal como el año pasado sobre Charles
Dickens, así este año sobre T.S. Eliot (1888–1965), otro gigante de la
literatura inglesa con una conexión directa a este rincón de Inglaterra. Fue en
un pabellón al aire libre con vista sobre la playa de Margate, cerca de 8 kms.
al norte de Broadstairs, que entre Octubre y Noviembre de 1921 el mundialmente
famoso poeta anglo-americano logró de nuevo escribir, y compuso unas 50 líneas
de la tercera de las cinco partes del poema más influyente del siglo 20mo,
al menos en el idioma inglés, La Tierra Baldía (1922).
El poema es
un retrato brillante del vacío en los corazones y mentes de los hombres
inmediatamente después de la Primer Guerra Mundial (1914–1918). En La
Tierra Baldía Eliot fragua una manera nueva, fragmentaria, de escribir
poesía, manera que capturó la condición espiritual rota del hombre moderno. Por
su amplio y profundo asidero de las obras maestras artísticas del pasado,
notablemente Dante y Shakespeare, Eliot pudo dar forma a la pobreza espiritual
de hoy en día. Por ejemplo, en las seis líneas del poema que están claramente
conectadas a Margate, una de tres niñas de la clase trabajadora cuenta como
ella dio su honor por nada, y para resaltar el vacío en las vidas de las tres
doncellas, las palabras de ellas están enmarcadas dentro de fragmentos de la
canción de las tres doncellas del Rin que abre y cierra la visión cósmica de la
épica El Anillo de los Nibelungos de Wagner.
El vacío y la
nada. ¿Por qué diantres deben los Católicos ocuparse con autores tan
deprimentes? La salvación es por Nuestro Señor Jesucristo, no por la cultura,
especialmente no por cultura nihilista. Una respuesta particular concierne a
T.S. Eliot. Una respuesta general concierne a toda la “cultura”, definida como
aquellas novelas, pinturas y música con las cuales todos los hombres de todas
las épocas necesariamente alimentan y forman sus corazones y sus mentes.
En cuanto a
T.S. Eliot, él mismo pronto descartó La Tierra Baldía como
“refunfuño rítmico”, y unos años más tarde él se hizo un miembro de la Iglesia
Anglicana. El había otorgado brillante expresión a la nada moderna, pero no se
había revolcado en ella. Continuó escribiendo un número de piezas de teatro y
especialmente el largo poema de los Cuatro Cuartetos, que bajo ningún
concepto son nihilistas, y sobre los cuales también el Dr. White, que ama mucho
a Eliot, hablará en Broadstairs dentro de unos pocos días. Habiendo asido el
problema honestamente, Eliot no se refugió en ninguna solución de avestruz como
lo han hecho muchos Católicos que se han dejado engañar por el Vaticano II.
Pues,
ciertamente, la cultura en general es a la religión (o irreligión) como los
suburbios de una ciudad son al centro de la ciudad. Y, así como un general
militar que tiene que defender a una ciudad sería de lo más tonto al dejar que
los suburbios sean ocupados por el enemigo, así cualquier Católico que ama su
religión no puede ser indiferente a las novelas, pinturas y música que están
moldeando a las almas todo alrededor de él. Por supuesto que la religión (o
irreligión) es central a la vida de un hombre, comparada con la cual la
“cultura” es periférica, porque la cultura de los hombres es, en el fondo, un
producto derivado de su relación con su Dios. Sin embargo la cultura y la
religión interactúan. Por ejemplo, ¿si no se hubieran dejado encantar muchos
Católicos por la racha de “La novicia rebelde”, hubieran sido tan fácilmente
engañados por el Vaticano II? O, ¿si los líderes actuales de la Fraternidad San
Pío X, contrastando cultura católica con anti-cultura moderna, hubieran asido
la profundidad del problema moderno, estarían ahora tan empeñados en volver
bajo los perpetradores del Vaticano II? ¡La cultura puede importar, tanto como
el Cielo y el Infierno!
Kyrie
eleison.